Encontrando cosas inesperadas

Me cansé de esperar a que la lluvia me arrullara, asi que me levanté con algo de hastío y decidí salir a caminar por los alrededores para despejar mi mente.

--Quiero helado~

Musité para mi mientras salía del apartamento, escondiendo mis manos en mi ligera y húmeda chamarra, caminando fuera del conjunto de apartamentos.

¿Me daría tiempo de ir a esa exposición del medioevo?

Fruncí los labios sintiendo un ligero frio, alejandome silenciosamente entre las calles.

Mientras caminaba por la ciudad tomé mi celular y lei el mensaje. Rapidamente le respondí.

SMS:

No pude dormir... estoy en el centro de la ciudad perdiendo el tiempo... pensaba ir al museo, ¿Y tu?

SEND

Guardé mi celular nuevamente mientras seguía caminando. Alargué un pequeño suspiro, admirando la ciudad en sus tonos grisaceos a causa de la lluvia, anhelaba a Londres.

SMS:

Si gustas, creo que entraré al museo, si quieres venir avisame y te veré en la entrada...

SEND

Deambulé un poco mas, estaba comenzando a sentirme cansada, pero de alguna forma, no me parecia importante, queria disfrutar de algo de libertad

Camine directo hacia el museo no se , sentí que tenia que ir aunque no me gustan mucho los museos. pero Sheryl no tiene que estar sola y menos con los Sellos de comando que anda cargando podrían atacarla en cualquier momento ademas es un pretexto. para ... espera no.




SMS-claro estoy en camino (◡‿◡✿) ya se usar el emonji -

Esbocé una pequeña sonrisa al leer su mensaje, asi que decidí esperarlo a las afueras del museo.

Comencé a tararear mientras me sentaba en los escalones a esperar, calentando con mi aliento mis manos, por alguna extraña razon estaban frias.

--Tengo dos pepinillos... tengo dos pepinillos~

Canturre bajito mientras esperaba, a Miroku, me preguntaba que había estado haciendo para no ir a clases.

Fruncí ligeramente mis labios, la gente entraba y salía del museo, saque nuevamente mi celular y conecte los auriculares para escuchar un poco de musica mientras esperaba.

--Comienza a hacerse tarde~

Susurré, supongo que si algo sucedia, me llamaría ¿No es asi? Simplemente continué esperando mientras cambiaba de pista.

--Tararara~ rara~

Era pesíma para aprenderme la letra de lascanciones que me gustaban pero, no perdia nada tarareandolas suavemente mientras esperaba.

Tomé mi telefono celular al ver la llamada de3 Miroku y contesté.

--¿Miroku?

Reí levemente mientras me ponía de pie.

--Eso depende de donde estás, si me dices donde estás creo que podría decirte donde esta el museo, usaría el gps.

Traté de no reirme, ya que estaba relativamente cerca del museo.

--No es necesario, Miroku, sigue derecho hasta llegar a la interseccion, cruza la calle rumbo a la plaza y cuando llegues a ella encontrarás el museo.

Afirme bajando las escalinatas del museo, parandome al frente de la plaza.

--Cuando llegues te veré~

--Está bien~

Musité al colgar el telefono mientras lo guardaba y frotaba ligeramente mis manos, era notorio que el otoño estaba llegando a su fin.

Caminé un poco por las húmedas escalinatas mientras esperaba y pensaba.

¿Que estaba haciendo?

--Claro, todo está bien~

Le sonreí mientras me encogia de hombros, al parecer habia corrido mucho.

--No tenias que correr... el museo no se iba a mover de aqui despues de todo.

Musité mientras le hacia una pequeña seña para que me siguiera escaleras arriba, según había visto, allí había una maquina expendedora de sodas y otra de café.

--¿Hiciste lo que tenias que hacer el dia de hoy?

--Pues... No, no es nada romano, pero tiene mucho que ver con la edad media, caballeros, armas, instrumentos de tortura, juicios y demas cosas... estaba pensando que quizas eso nos ayudaria, ya sabes...

Musité tratando de no darle importancia alhecho de que evadio mi pregunta.

--¿Vamos?

--Descuida...

Sonreí levemente colocandole el gorro de su sudadera con cuidado.

--Si hallamos algo lo enfrentaremos, no creo que algo o alguien se arriesgue a luchar a plena luz del dia, ¿Verdad? Habrá que mantener un perfil bajo~
Solté mientras introducia un billete en la maquina expendedora y sacaba un bar de botellas de agua de sabor, una de fresa y otra de manzana.

--¿Cual prefieres?

Pregunté mientras miraba discretamente a mi alrededor en busca de algo sospechoso.

--Ok... entonces el de manzana es para ti

Reí bajitopor su efusividad mientras nos adentrabamos en los salones del museo, había estatuas, armaduras, espadas... muchas cosas antiguas, entre galerias de jarrones, féretros y un sin fin de culturas extintas hace ya muchisimos años.

--Cuantos detalles...

Musité al prestar atención a unas losas de piedra, en las cuales estaban tallados muchos jeroglíficos, donde, por lo que pude apreciar pictograficamente, que especificaban como y cuando se debía sembrar en el egípto antiguo.

--La sala que buscamos... ¿Estará por allá?

Pregunté señalando un pasadizo con aspecto a calabozo

Bajé mimirada hacia mi mano negando levemente.

--No duele, al menos por ahora no me causa ningun dolor... espero que asi siga...

Musité con un suspiro mientras caminabamos por el solitario pasillo, no sabía que estabamos buscando realmente, quizas no estaba allí, quizas no era tangible, solo queria no pensar mucho por ahora al respecto.

--¿Me odiarias si te dijera que no se que buscamos?

Susurré alnotar el trémulo silencio de la sala, antes de beber un poco de agua.